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ULTRAFOTOGRAFÍA 


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Martínez Bellido, Marta Bisbal, Xisco Bonnín, Iñaki Domingo, Inma Femenía, Jorge Isla, Alejandro Javaloyas, Marta Pujades, Miguel Ángel Tornero, Evarist Torres, Cecilia de Val i Simon Zabell
Comisario: Fernando Gómez de la Cuesta

La luz justo antes de formar la imagen, la luz justo después. La “ultrafotografía” trasciende el concepto usual de fotografía para superarlo de la manera más extraordinaria y simple, volviendo a su origen, a lo esencial, a lo fundamental, a lo básico. Una investigación física, estética, óptica, lumínica, formal y conceptual que quiere desbordar sus límites para entrar de lleno en aquello que hay más allá, en esa “ultrafotografía” que nos habla de la luz y de la belleza, de la técnica y del soporte, de la magia y de la ciencia, de su reproducción y de su unicidad. Una fotografía que no posee la retórica de la postfotografía ni la narratividad del documentalismo, una fotografía sin fotos, sin cámara, una fotografía experimental y (foto)sensible· asumen la autonomía plena de la fotografía, no como medio sino como fin, investigan y formalizan piezas que son el objeto, el sujeto y la obra, la causa y el efecto, la razón y la emoción. Eso les hace emprender un camino donde lo figurativo y el relato desaparecen, donde surge la inmaterial consistencia física de la nueva visualidad: telescópica, microscópica, fractal, analógica y digital, una forma de mirar que nos acerca a una nueva (ir)realidad, aquella que detectó Paul Éluard en cada uno de nosotros: hay otros mundos pero están en éste, hay otras vidas pero están en ti.[1]

Esta “Ultrafotografía” investiga sobre el infinito, sobre el universo, sobre el micro y el macrocosmos, pero también sobre lo íntimo, sobre lo personal, sobre lo propio. Una fotografía ultra que incentiva las derivas de aquellos exploradores, de aquellos captadores de imágenes, que no persiguen ni la fábula ni el cuento, que desarrollan unas piezas independientes, objetuales, pero también etéreas e inmateriales, quizás indescifrables, sencillas y contradictorias. El artista debe comprender lo incomprensible, fotografiar lo invisible, alcanzar lo inalcanzable, por eso la ciencia recurre a ellos para explicar lo inexplicable. 

Son esos puntos de intersección donde lo físico transita hacia lo metafísico y lo material conecta con lo espiritual, donde nuestra propia imagen reflejada transmuta en un espejismo complejo, en el que la luz se descompone en todos los colores del espectro, donde los seres sensibles mantienen su interés mientras recorren con el dedo índice la grafía infinita de una cinta de Möbius,[2] haciendo abarcable lo inabarcable, midiendo lo insondable. Todo ello tiene lugar, como sucede de manera habitual en la historia de la fotografía, en aquel espacio en el que cada final es un nuevo principio, allí donde los rastreadores de la imagen buscan sin prisa.
 

[1] Luciano Rincón, Cartas cruzadas entre Paul Éluard y Teofrasto Bombasto de Hohenheim llamado Paracelso, Los Libros de la Frontera, Barcelona, 1976, pàg. 14 i 136.
[2] Un tipo de superficie que recibe su nombre en honor de uno de sus descubridores: August Ferdinand Möbius (Schulpforta, Alemania, 1790 – Leipzig, Alemania, 1868).

 

Duración:

Desde el 5 junio de 2025hasta el 12 octubre de 2025

Días: Diariamente
Localidad: Palma
Lugar de celebración:

Casal Solleric

Precio: Gratuït
Dirección:

Passeig del Born, 27

Galería Multimedia

Fecha última modificación: 30 de mayo de 2025