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Margalida Escales · L'ombra del blanc


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Comisaria: Magdalena Aguiló Victory Nit de l’Art 2025 / Espai Cor / Ajuntament de Palma


Entre el mar y el cielo,
sombras que habitan la forma


Las obras de Margalida Escalas, de manera parecida a la filosofía japonesa, celebran la imperfección, la sencillez y la comunión con la naturaleza. Son fruto de una contemplación atenta y silenciosa que nos recuerda que lo que es esencial, no grita. Objetos que contienen restos de vida y nos impactan porque, a menudo, revelan elementos que tenemos registrados en la memoria. En los trabajos anteriores de la artista predominaba la memoria marina, espinas de pez, caparazones de erizo, escupiñas, fósiles. Ahora la artista entra en un juego ambiguo entre el mar y el cielo, entre la evocación de las formas orgánicas y de las constelaciones estrelladas, inspiradas en las noches de Santanyí. Piezas que parecen orbitar en un cosmos íntimo, como si fuesen pequeños astros en suspensión, unidos por constelaciones blancas y negras, instaladas en las paredes del espacio como testimonios de una cosmogonía silenciosa.


Nacer y crecer en un paisaje del sur mallorquín, rodeado de vestigios de culturas talayóticas, de canteras de marés y con la omnipresencia del mar, deja una huella. La tierra y el mar son la infancia de Margalida Escalas y son una constante insistente. En estos últimos tiempos, la artista ha vuelto al pueblo de Santanyí y disfruta de un nuevo taller en medio de un paisaje poblado de campos pedregosos. Un entorno que regala –sin caer en ningún tópico-, canto de pájaros, rumor de insectos, espléndidas puestas de sol y noches de luna y estrellas. Ella respira habitualmente este aire de serenidad y silencio que refuerza inevitablemente los vínculos de su trabajo con la naturaleza.


La artista es una disciplinada trabajadora, investigadora infatigable de técnicas, cualidades y texturas. Formas que se anuncian con grandes dosis de intuición, sensualidad y carga poética. Escalas ha trabajado durante décadas, al margen de modas, de manera lenta y silenciosa en la quietud de sus talleres para situarse en el extremo contrario de la agitación y el alboroto de los tiempos actuales. Se alimenta de su entorno inmediato más que de influencias externas, la visión de un detalle ignorado de algún trabajo anterior o la de un objeto que ha rodado durante años por el taller y de pronto, se vuelve inspirador. Formas imperceptibles ya existentes que esperan su turno para entrar en la escena creativa. De hecho, cuando observamos determinadas obras de la etapa de las arquitecturas anteriores ya intuimos el germen de algunas de las formas actuales. Obras que han tenido una larga gestación de cerca de diez años y que ya resultaba más que necesario ponerlas al alcance del público.


La artista demuestra una preocupación especial por la piel de las obras, potencia las cualidades de la materia con todo tipo de grafías, dibujos y símbolos. Las piezas actuales aparecen perforadas por líneas de incisiones y/o espirales de puntos negros para generar una superficie agujereada de pequeñas sombras. El blanco es luz y el negro es sombra, juntos crean un espacio donde la materia y el vacío dialogan con sutileza. Piezas blancas sobre paredes blancas, piezas con la piel perforada por puntitos negros que colonizan la superficie total de la obra. Una vez instaladas, estas incisiones se convierten en sombras negras que habitan la obra, a la manera de sombras-orgánicas. Y, aunque sepamos que son sombras impostadas, experimentamos la sensación del misterio entre la sombra y la luz, y la belleza de la ambigüedad de este juego. He aquí, la sombra del blanco. Y en estas sombras —en lo que callan— encontramos la presencia sutil de la naturaleza.


En el año 1995, se inauguraba en Palma el grupo escultórico Urbs de Margalida Escalas, un conjunto instalado en la pequeña Plaça del Marquès del Palmer, al lado de la Plaça Major. Treinta años más tarde, muy cerca del emplazamiento anterior, presentamos la instalación La sombra del blanco en el Espai Cor, una buena ocasión para constatar la admirable evolución del lenguaje de la artista. La propuesta actual es la invitación a un viaje quieto entre la memoria marina y el infinito del cielo. Aquí, la cerámica no es sólo forma: es ecosistema, una conexión entre tierra, mar y cielo.


Magdalena Aguiló Victory
Montuïri / Es Carregador, agosto 2025

Duración:

Desde el 20 septiembre de 2025hasta el 6 enero de 2026

Días:
Localidad: Palma
Lugar de celebración:

Espai Cor

Precio: Gratuito
Dirección:

Plaça de Cort, 1

Galería Multimedia

Fecha última modificación: 15 de septiembre de 2025